und. Then turned and left for the airport. Zhou Xingzu looked at MB2-712 the back of their departure and MB2-712 sighed. In 400-051 300-206 the 352-001 past 20 1z0-434 300-101 years, he has felt 810-403 the retreat and 400-051 352-001 the realization 300-115 810-403 of 400-051 1Z0-434 tExam Number: Associated Certifications: Duration: Available 352-001 Languages: Registration: Exam Policies ability. 400-051 Whenever 70-413_Exam he wants to 1Z0-434 retreat, 810-403 he will naturally 1Z0-804 enter and enter the state 70-413_Exam of self denial. Many 1Z0-434 400-101 of the previously 300-206 70-413_Exam 352-001 inconspicuous details MB2-712 will emerge 300-206 in my 100-101 200-310 810-403 mind. If the 70-410 IQ of 300-206 a person C2090-919 is 300-208 likened to the 1Z0-804 810-403 computing power of a computer, Zhou 1z0-434 Xingzu s 400-051 400-101 810-403 computing power will be greatly improved in the state 70-410 640-916 of retreat. 300-115 Twenty 70-413_Exam years of retreat, 640-916 the effect is estimated to reach the average person 352-001 1Z0-804 400-101 400-051 for a 300-206 hundred 300-206 years. 1Z0-434 300-101 Speaking of it, he is 100-101 also 300-208 70-413_Exam 100-101 a genius. Although 640-916 each realm has no strict 1Z0-434 2V0-620 400-051 division. But in the 400-101 300-115 same MB2-712 realm, some people are MB2-712 deep 400-101 in cultivation and 300-206 some C2090-919 are shallow. 300-115 Some 300-208 400-051 of them are 100-101 still 400-051 not 70-410 stable, but some have touched the realm of immortality. Therefore, 1Z0-434 it 200-310 is 100-101 hard 300-206 to 100-101 divide, but it 2V0-620 can also 300-206 C2150-606 300-206 be 352-001 divided. Zhou Xingzu C2150-606 is probably 810-403 300-206 1z0-434 now, 300-208 400-051 and can MB2-712 barely count as a late stage. TExam 300-208 Number: Associated 352-001 Certifications: Duration: 1Z0-804 300-208 Available 400-051 C2090-919 Languages: Registration: Exam Policies time 300-208 640-916 I will go to 640-916 witness 300-208 the 200-310 Exam Number: Associated Certifications: Duration: Available Languages: Registration: Exam Policiestory I 70-410 d. neither 1Z0-434 400-051 810-403 100-101 810-403 thinking nor 1z0-434 operational 1Z0-804 ability can 100-101 compare with 300-101 Professor Jiang Si. Zhou Xingzu still quietly 352-001 watching, Jiang Si 640-916 1z0-434 Professors play with 100-101 instruments 300-101 in 810-403 the lab. The 100-101 original messy data, 1Z0-434 C2150-606 and strange instruments, have 100-101 their own C2150-606 70-410 value in Exam Number: Associated 400-051 1Z0-434 Certifications: Duration: Available 300-115 400-051 Languages: Registration: 300-208 Exam Policies 1Z0-434 eyes. In C2150-606 the ability of C2150-606 300-101 scientific research, Professor 400-051 Jiang Si is the 300-208 pioneer of 400-101 human 400-051 transformation. 1z0-434 And Zhou Xingzu, C2090-919 the latecomer 352-001 200-310 to the C2090-919 300-101 system, is actually two levels. 300-115 1Z0-434 Because Professor Jiang 810-403 Si has the strength, he will renovate 1Z0-434 300-208 1Z0-804 the human body , research 400-051 300-208 more deeply, 2V0-620 and C2090-919 dig out newer knowledge. 352-001 810-403 100-101 However, Zhou Xingzu did 352-001 not have the strength to explore tExam Number: Associated 352-001 Certifications: Duration: Available Languages: Registration: Exam Policies kind of excavation. 400-051 Suddenly, Professor Jiang Si, 2V0-620 who was obsessed 200-310 with the 2V0-620 70-410 experiment, returned to God and took a 200-310 2V0-620 long breath. 70-413_Exam Use your sleeves to wipe off the sweat on your forehead. Professor Jiang Si glanced at Zhou Xingzu, with a slight disappointment in Exam Number: 300-206 Associated Certifications: Duration: Available Languages: Registration: Exam Policies tone How are you still here Get it Zhou Xingzu s eyes brightened. The 497th human madness 2 2 Zhou Xingzu said that it is not that Professo.
Así es la vida, así es el fútbol. El mismo jugador que devolvió a la vida al Deportivo Pasto, Ray Vanegas, fue el que terminó dándole la novena estrella al Junior de Barranquilla. En esto también juega la experiencia. Un gol de Vanegas llevó a los pastusos al desempate desde el punto penalti. Pero luego se dejó provocar de Viera en el quinto y definitivo cobro para su equipo. Lo mandó callar, se salió del partido y terminó mandando la pelota por encima del arco.
Otra vez en Bogotá, como en 1977, cuando Junior colgó su primera estrella en el escudo. O como en aquella noche de 1995 en la que el ‘Pibe’ Valderrama no quiso dar la vuelta olímpica, molesto por una derrota 3-1 con Santa Fe que, al final, no tuvo consecuencias. O como en aquella noche de 2015 en la que, también contra Santa Fe, ganó la Copa Colombia, con ese hombre hecho milagro llamado Julio Avelino Comesaña en la raya (véase nota alterna). ¿Que a Junior no le gusta la altura ni el estadio El Campín? Pues de sus nueve estrellas, tres las ganó en la ‘nevera’, como le dicen esos costeños que aún celebran.
La alegría, la algarabía, seguramente el baño de harina, el gran festejo, aunque con una extensión a Bogotá, seguramente se está dando aún a esta hora en Barranquilla. Porque el juego como tal, tanto en los primeros 90 minutos en Barranquilla como en la segunda mitad de la final en El Campín, resultó ser frío, como la noche bogotana que recibió un juego con sede improvisada, después de que la Dimayor decidiera que en Ipiales no se podía jugar y obligara al Deportivo Pasto a trastearse, con todo y seguidores, a Bogotá.
La fiesta se vivió más en el momento previo que en los 90 minutos, con más de 100 buses recorriendo el país de sur a norte y de norte a sur, con destino a la capital. Fue un partido duro, en el que se pegó mucho (el árbitro Carlos Betancur, de buena actuación, sancionó 31 faltas, 15 del Pasto y 16 del Junior), en el que no hubo mayores acercamientos a los arcos, en el que al Junior le costó encontrar, como le había pasado en el Metropolitano, las vías para acercarse al arco de Neto Volpi.
Pero el que tenía la ventaja era Junior, y el que estaba obligado a ganar era Deportivo Pasto. Pero el equipo nariñense, que ataca poco pero tiene efectividad, tampoco es que haya estado muy cerca de conseguir un gol. Parecía mostrar una actitud diferente a la del resto de la temporada cuando en la primera jugada del partido, Andrey Estupiñán intentó sorprender al portero Sebastián Viera con un remate desde afuera del área que pasó por encima del arco sur de El Campín. Pero fue una acción aislada. Esa, más un remate que atajó Viera, pero en el que hubo una mano previa. Eso, lo único que quedó en la libreta de apuntes como intenciones ofensivas del Pasto.
El de la obligación, repetimos, era el Deportivo Pasto. Pero no encontraba la vía para hacer daño. Solamente un milagro o un error podía salvarlo. Y llegó lo segundo, en el minuto 81: Sebastián Viera jugó un balón al borde del área, donde Gabriel Fuentes, improvisado como zaguero central tras las repetidas lesiones que dejaron sin opciones al DT Julio Comesaña, no supo qué hacer con la pelota. Y en esa duda, Ray Vanegas aprovechó para robarse la pelota y anotar el gol que llevó la serie al desempate desde el punto penalti.
Había nervios en los hinchas del Junior, seguro. Los antecedentes en desempates desde el punto penalti no ayudaban a los barranquilleros. El más reciente, el de la Copa Suramericana, en la que el equipo de Comesaña perdió la final con Atlético Paranaense. Pero esta vez, Junior dio una muestra de efectividad impresionante. No falló ninguno de sus cinco cobros. Acertaron Narváez, Rangel (que había entrado por Teo Gutiérrez), Rafael Pérez, Sánchez y Viera. Solamente el de Pérez tuvo algo de susto, pues Neto Volpi alcanzó a rozar la pelota.
Pasto también había acertado todo: Jown Cardona, Carlos Núñez, Mariano Vázquez y Neto Volpi no fallaron, y eso que el portero Viera intentó distintas tácticas para tratar de sacarlos del partido. La última fue la que le funcionó: Ray Vanegas se dejó provocar, se desconcentró y mandó la pelota muy por encima del arco. Ese balón aún no ha caído. Seguramente, se encontró por el camino la estrella ‘tiburona’.
No fue un semestre fácil para Junior. El fracaso en la Copa Libertadores le costó la cabeza a Luis Fernando Suárez, el técnico que había reemplazado a Comesaña en enero, cuando se fue a Colón de Santa Fe. Pero el antioqueño había dejado al equipo en el cuarto lugar de la Liga. Comesaña completó la tarea. Y hoy Junior tiene la novena.
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