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En una actividad ejecutada por varias entidades, y apoyada por pescadores, se mejoraron 2.200 metros cuadrados de este ecosistema y se recogieron 5 toneladas de residuos que estaban contaminando la zona.

En una jornada conjunta impulsada por la Secretaría Distrital de Control Urbano y Espacio Público, y Barranquilla Verde, con el apoyo de los pescadores de la zona, se logró la limpieza de 2.200 metros cuadrados de la ciénaga de Mallorquín, con la recolección de 5 toneladas de residuos sólidos, orgánicos y toda clase de desechos.

La intervención de los equipos distritales se hizo en dos zonas: un grupo desplegó su labor en la franja de humedal, antes de acceder a la ciénaga, mejorando 200 metros cuadrados de espacio, con poda, recogiendo tonelada y media de residuos sólidos y media tonelada de residuos orgánicos y desechos peligrosos para la comunidad que transita a diario por la zona, tales como recipientes de aceite, jeringas y envases de vidrio.

El segundo grupo, que ingresó a la ciénaga, se ubicó en el tajamar, en donde se limpiaron 2.000 metros cuadrados y se recogieron 3 toneladas de residuos sólidos, correspondientes a 100 metros cúbicos de basura, que posteriormente se clasificó y se retiró de la zona.

En esta acción participaron 50 facilitadores de espacio público, más 35 funcionarios de esta dependencia distrital, lo mismo que un equipo de profesionales y recolectores de residuos de Barranquilla verde.

El alcalde de la localidad Riomar, Mauricio Villafáñez, y el secretario distrital de Control Urbano y Espacio Público, Henry Cáceres Messino, estuvieron presentes en esta actividad.

Las autoridades distritales destacaron la participación de la Asociación de Pescadores de la ciénaga, cuyos integrantes aportaron materiales adecuados para que las tareas de limpieza se llevaran a cabo adecuadamente.

Para preparar esta intervención, la Secretaría Distrital de Control Urbano y Espacio Público realizó dos recorridos previos, uno de ellos por el río Magdalena y otro en la ciénaga, en un trabajo de identificación de las áreas más contaminadas con el fin de establecer estrategias para realizar esta jornada.

De manera simultánea, las Inspecciones de Policía Urbanas adscritas a la Secretaría de Control Urbano y Espacio Público hicieron visitas preliminares en zonas aledañas a la ciénaga, con el fin de identificar posibles infracciones urbanísticas establecidas en el artículo 135 del Código de Policía y Convivencia.

“Este es un compromiso de todos, del Distrito, de los ciudadanos que arrojan desechos en la ciudad y de los habitantes de la zona. Nosotros tomamos la iniciativa y empezamos a limpiar la zona, planeamos que se convierta en un trabajo estratégico para ir avanzando hacia una solución definitiva”, afirmó el secretario Henry Cáceres.

Acciones de este tipo y otras de recuperación seguirán ejecutándose, de manera conjunta, por varias entidades que tienen jurisdicción en la ciénaga de Mallorquín, como parte de un plan que busca ir eliminando los factores de riesgo que han afectado este ecosistema durante varias décadas.

La intervención del Distrito se fundamenta en el enfoque ambiental del Plan de Desarrollo 2016-2019, que plantea una Barranquilla sostenible y protegida frente al cambio climático, comprometida con la protección, el mantenimiento y el respeto por el medio ambiente y los ecosistemas, resguardándolos de los niveles de contaminación y afectación, entre ellos la ciénaga de Mallorquín como elemento estratégico de nuestro potencial ambiental.