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La comisión primera de la Cámara de Representantes aprobó en primer debate el proyecto de ley que modifica el Código Nacional de Policía y Convivencia, para darles facultades a los alcaldes distritales y municipales como autoridades de policía.

El proyecto de ley fue radicado por la representante a la cámara por el departamento del Atlántico, Karina Rojano Palacio. “Con este proyecto buscamos darles facultades a los alcaldes para que puedan reglamentar y permitir de forma permanente y/o temporal, en sus territorios, las aglomeraciones de personas en el espacio público, en virtud de reconocer las condiciones histórico-culturales de cada municipio, sin recibir las medidas correctivas tipo multa que trae hoy el Código Nacional de Policía”, señaló la congresista.

Según Rojano, el actual Código de Policía fue pensado y elaborado desde Bogotá, olvidando las diferencias culturales, sociales, históricas y hasta climáticas propias de cada región. Según ella, no es lo mismo regular el uso del espacio en una ciudad del interior que en una como Barranquilla. “Establecer restricciones generales en el espacio público como lo hace hoy el Código de Policía, sin tener en cuenta las expresiones como son aquellos eventos, fiestas o ceremonias que se realicen como manifestación de la raza, la religión, la lengua, el arte y el folclor en general, las cuales hacen parte de las costumbres culturales con arraigo e identidad, que han venido siendo practicadas a lo largo de la historia de esa comunidad, sería desconocer la diversidad cultural, el acceso a la oferta estatal y en últimas, la posibilidad que han tenido ciertas poblaciones de contar con espacios dignos para ejercer sus expresiones culturales, a través de la recreación y el esparcimiento”, dijo la representante.

A la iniciativa legislativa le restaría tres debates para convertirse e ley de la República.

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