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La captura se logró en el barrio La Granja del municipio de Turbaco, Bolívar, donde se materializó la detención de una mujer identificada como Yeudith Karina Martínez Mejía, de 32 años, quien manifestaba ser médica y solo había cursado seis semestres de la carrera. Además la hoy capturada falsificó el acta de grado para engañar a las personas o centros de Salud donde esta habría laborado.

Tras varios meses de investigación por el grupo de investigación criminal adscrito al área metropolitana de Barranquilla se logra la captura por orden judicial por los delitos de homicidio y uso de documento falso.

Es de anotar que la mujer presenta tres anotaciones por los delitos de Falsedad en documento privado del 7 de marzo de 2013, otro por Fraude procesal del 1 de diciembre de 2014 y el último por homicidio del 4 de enero de 2015.

En agosto de 2017, la falsa médica llegó a un pre acuerdo con la Fiscalía, en el que aceptó los cargos imputados, a cambio de que se le reconociera el atenuante de ira e intenso dolor. El 19 de octubre de 2017, el Juzgado Segundo Penal del Circuito de Soledad la halló responsable de la comisión de los delitos de homicidio simple y uso de documento falso, al tiempo que le impuso una pena de 90 meses de prisión (7 años y 5 meses) en la misma decisión el juez ordenó se librara orden de captura en contra la mujer de 32 años, quien se encontraba prófuga de la justicia.

El caso por la que esta falsa médica fue capturada se dio el 4 de enero de 2015, cuando el joven músico Ray Fontalvo Gálvez, de 25 años, llegó a la clínica Porvenir del municipio de Soledad, para ser atendido por un fuerte dolor que presentaba en la pierna derecha por un absceso que le había salido y por una fiebre que lo aquejaba.

El paciente llegó a la urgencia del centro asistencial hacia las 11:15 de la mañana, acompañado de su esposa, tras una larga espera, finalmente fue atendido por la médica en turno, antes de que le fuera suministrado algún medicamento su esposa le advirtió a la doctora que su pareja era alérgico a la penicilina. Sin embargo, y como consta en la denuncia penal que instauró en la Fiscalía, la falsa médica respondió que los médicos eran ellos y que para eso habían estudiado. Por ello ordenó que se le aplicara un gramo de oxacilina por vía intravenosa, que es un antibiótico. También le fue inyectado clindamicina de 600 miligramos, otro antibiótico.

No transcurrieron dos minutos –según dijo la esposa– cuando el medicamento empezó a hacer reacción en la humanidad de Fontalvo Gálvez: convulsionó y presentó dificultad para respirar. En su denuncia, la mujer asegura que corrió y le quitó el catéter a su esposo, al tiempo que gritaba pidiendo ayuda, a lo que un auxiliar llegó y le puso adrenalina al paciente, pero este no respondió, el paciente fue remitido al hospital de la Universidad del Norte, donde les informaron a los familiares que había llegado sin signos vitales.

La falsa médica ya se encuentra en Barranquilla donde está siendo judicializada.