Con Design Thinking, estudiantes de Unicosta aprenden a ser más innovadores

Jul 19 2019 02:04 pm 0
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En la primera versión de este reto empresarial participaron estudiantes de Ingeniería Ambiental, Agroindustrial y Eléctrica. Para el segundo semestre de 2019 se espera hagan parte también estudiantes del programa de Arquitectura.

 

Luego de un primer semestre académico en el que se implementó de forma satisfactoria la asignatura Design Thinking, con un matiz de resolución de retos empresariales, en la que estudiantes de Ingeniería Ambiental, Agroindustrial y Eléctrica participaron en un desafío para incorporar características bioclimáticas en el portafolio de cubiertas metálicas de la empresa Acesco, la asignatura se volverá a implementar, invitando esta vez a estudiantes de Arquitectura para que también hagan parte del estudio.

La primera versión de esta estrategia con dicha compañía, fue una experiencia satisfactoria, de acuerdo con Estiben Hernández, líder corporativo de innovación de Acesco, por lo que continuará en el segundo semestre académico.

“Nuestro interés es ampliar los sistemas de innovación, por ende, la interacción con aliados como estudiantes y docentes de universidades, nutre nuestro ecosistema y nos permite encontrar oportunidades para crear trabajos colaborativos. Los estudiantes desarrollan conocimiento, adquieren habilidades y nosotros podemos explorar distintos saberes. Hacer parte de estos procesos nos permite ver, desde distintas perspectivas, los retos a los que nos enfrentamos día a día porque contamos con los enfoques frescos con los que vienen los estudiantes”, comenta Hernández.

Al reto anterior se le suma el de plantear “¿qué usos en fachadas se pueden desarrollar para las cubiertas metálicas Acesco?”, y va dirigido a los estudiantes que quieran resolver problemas en equipo usando su capacidad de creación sin límites.

Andrés Sánchez-Comas, investigador de la Universidad de la Costa del Departamento de Gestión Industrial, Agroindustrial y Operaciones, que lideró la enseñanza de esta metodología, señala que para los dos retos que se implementarán en 2019-2 (‘Qué y cómo incorporar características bioclimáticas en el portafolio de cubiertas metálicas de la empresa Acesco’ y ‘¿Qué usos en fachadas se pueden desarrollar para las cubiertas metálicas de Acesco?’), se pretenden estudiantes que estén dispuestos a asumir con responsabilidad, calidad y excelencia la identificación de los problemas.

“Es para estudiantes que quieran elevar cuestionamientos y preguntas que desafíen las zonas de confort y seguridad, y que estén dispuestos a encontrarles respuestas disruptivas. Y, sobre todo, a comprobarlas a través de prototipos rápidos que despejen el camino hacia la innovación”, indica.

La asignatura Design Thinking plantea el acercamiento de problemas empresariales a entornos académicos para potenciar el aprendizaje práctico, y prepara a los estudiantes de forma óptima para afrontar escenarios laborales. Así mismo, busca desarrollar las competencias para potenciar la innovación a través de la combinación de procesos, herramientas y capacidad de pensamiento.

“Más que un proceso se ha convertido en un estilo de pensamiento para la solución de problemas, de aquí que su ámbito de aplicación ha salido del desarrollo de productos a los servicios, negocios, e incluso problemáticas sociales”, indica Sánchez-Comas.

Durante el curso se trabaja con la herramienta más potente que tienen los seres humanos: la mente. El pensamiento de diseño busca usar el máximo potencial para, desde puntos de vista holísticos, ser capaces de concretar demostraciones de efectividad a hipótesis de problemas bien analizados, entendidos y comprendidos. “A través de la creación rápida de prototipos podremos construir herramientas de comunicación y socialización de ideas, con las que validaremos el descubrimiento de conceptos y conocimientos, identificando y mitigando riesgos en el diseño y desarrollo de productos, servicios y soluciones de cualquier ámbito”.

De acuerdo con el investigador, el primer reto significó un desafío para romper los esquemas tradicionales de enseñanzas, en los que buscaron aprender a fondo con el fin de generar experiencias de creatividad con miras hacia la innovación.

Los estudiantes que quieran hacer parte de los retos empresariales deben cumplir con unos requisitos que les permitirán culminar satisfactoriamente con el proceso, como puntualidad, responsabilidad, calidad en cada trabajo a realizar, capacidad de trabajo en equipo, orientación a resultados y conciencia del cumplimiento de actividades en el marco de un proyecto, entre otros.

Es importante aclarar que no se necesita ser creativos, pues en la asignatura aprenderán a serlo. “Lo más importante es que haya disposición para aprender y cumplir con excelencia. Los estudiantes deben cumplir con los requisitos mínimos de la malla curricular para cursar electivas de profundización”, explica.

La primera edición de la asignatura Design Thinking, ofertada por el Departamento de Gestión Industrial, Agroindustrial y Operaciones, contó con la participación clave de los investigadores Dionicio Neira Rodado, Miguel Ángel Ortiz, Sandra De la Hoz Escorcia y los ingenieros Diego Borrero, padre e hijo.


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