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Alcalde Char supervisó los trabajos, el mandatario afirmó que se trata de un moderno método que reduce el impacto de la obra en movilidad y convivencia en el sector.

Con la moderna técnica Jacking Pipe, que permite trabajar con una máquina que perfora la parte inferior de la vía sin tener que romperla, garantizando el proceso constructivo con el menor impacto posible en movilidad y convivencia de los vecinos, avanzan los trabajos de canalización del arroyo de la calle 91.

El alcalde Alejandro Char supervisó la obra y destacó los beneficios que trae este proceso a la ciudad, asegurando que mientras Barranquilla duerme el arroyo de la 91 es canalizado.

“Importante felicitar a nuestra ingeniería local porque propusieron al Distrito una solución innovadora para este arroyo de la 91. No creo que en Latinoamérica se haya hecho un proyecto con estas condiciones tecnológicas, primero por el tema de los arroyos en la ciudad y luego por la tecnología de punta. Este arroyo se está canalizando sin tener que paralizar la movilidad y tampoco generar molestias en el sector. Le damos los aplausos a esta técnica”, apuntó Char.

El mandatario de los barranquilleros explicó el proceso constructivo y las bondades que trae a la ciudad porque permite canalizar uno de los arroyos más peligrosos.

“Estamos canalizando el arroyo sin tener que romper la vía, como quien dice a control remoto, desde acá arriba, manejado desde los cuartos de control con presiones hidráulicas, se hace un túnel y se conduce en 1500 metros lineales que es lo que tiene este arroyo, mientras la máquina hace el cilindro, se saca el material, mete los tubos por donde pasará el agua. Esto parece un sueño, estamos canalizando y la gente no se va dar cuenta que a la vuelta de 5 o 6 meses, debajo de este pavimento, va a estar todo el túnel que va a conducir el agua”, agregó la primera autoridad del Distrito.

Para esta obra se cuenta con el apoyo de expertos internacionales, la máquina tuneladora, como se le conoce, irá avanzando, según se estima, en 10 metros lineales cada 24 horas. Según las proyecciones en 5 o 6 meses deben estar listos los 1.500 metros, que es la extensión del arroyo.

El alcalde precisó que al mismo tiempo que se canaliza el arroyo por la parte inferior se irán realizando las obras complementarias como rejillas, captaciones, arborización, senderos peatonales e iluminación.

La tubería que se está usando es en concreto de alta resistencia y cuenta con un recubrimiento interno de alta densidad que permite garantizar las velocidades del diseño de la misma.

Cabe mencionar que el arroyo de la calle 91 y 92 tiene una longitud de 1.500 metros lineales, un caudal de 29.3 metros cúbicos por segundo y una velocidad de 6.13 metros por segundo. Recorre los barrios de la localidad Riomar y su canalización beneficiará a más de 100.000 habitantes.