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Según el escrutinio total de los procesos de revocatoria de mandato llevados a cabo este domingo en los municipios de Ocaña (Norte de Santander) y El Copey (Cesar), ninguno de los dos superó el umbral necesario, a pesar de que en ambos ganó la opción por el ‘sí’.

Las urnas cerraron a las 4:00 p.m., y cerca de una hora después, la Registraduría Nacional del Estado Civil publicó los resultados.

En el caso de El Copey, el umbral necesario era de 5.839 votantes, pero solo se depositaron 3.821 votos, de los cuales el 88,54 por ciento apoyaba la revocatoria del alcalde, José Luis Nieves Pérez.

Más temprano, la Procuraduría abrió indagación a Nieves por presuntamente interferir en el proceso de revocatoria, pues se conocieron audios y videos de una reunión con beneficiarios de un proyecto de vivienda, lo que podría constituir una participación indebida en política.

Entretanto, en el municipio de Ocaña eran necesarios 18.418 votos para que el proceso de revocatoria de la alcaldesa, Miriam Pardo Carrascal. Con el 100 por ciento escrutado, la Registraduría informó un total de 17.354 votos, de los cuales el 94,69 por ciento dijo ‘sí’ a la revocatoria de la mandataria local.

Las autoridades civiles, electorales, militares y veedores en Ocaña, acompañaron la jornada electiva que se generó en el marco del proceso para apartar a la mandataria de su cargo que inició el pasado 2 de enero cuando un grupo de ciudadanos inscribió un comité de revocatoria aduciendo ausencia de gobernabilidad y falta de transparencia en la administración de la funcionaria, que llegó al poder en los comicios regionales de 2015.

Aunque la consulta se presentó con normalidad, los ciudadanos aprovecharon las redes sociales para denunciar inconvenientes e irregularidades. Entre las quejas estuvo el cierre de vías por obras, la prohibición de la circulación las motos; y reparaciones a daños en el sistema de acueducto y alcantarillado. Ante esto, los pobladores aseguraron que se trató de un sabotaje para impedir que los ciudadanos habilitados salieran a votar.

Miriam Prado Carrascal hace menos de un mes recobró su libertad, tras permanecer varios días con medida de detención domiciliaria como parte de un proceso judicial que adelanta la Fiscalía por presuntos hechos de corrupción en su administración desde octubre de 2016.

La mandataria había sido capturada por los delitos de violación al régimen de inhabilidades y de celebración indebida de contratos por un grupo del CTI el pasado 17 de febrero. En el procedimiento también se realizó la detención de los secretarios locales de Gobierno, Juan Pablo Vaca, y el secretario de Movilidad, Albert Urquijo.

Estos procesos de revocatoria se llevaron a cabo después de que la Sala Plena del Consejo Nacional Electoral no lograra consenso para intervenirlos.

El de El Copey y el de Ocaña hacían parte de al menos 107 procesos de revocatorias de mandato que se tramitan en el país contra alcaldes y gobernadores.